Un hecho insólito ocurrió este lunes en la parroquia de San Vicente, luego de que un hombre decidió destruir con su vehículo un altar sagrado. Según testigos, el sujeto parecía delirar y gritaba “el padre Pío me viene a buscar”, en referencia al sacerdote católico italiano fallecido en 1968, conocido por la aparición de supuestos estigmas en su cuerpo.
El individuo con “delirios místicos” estrelló su vehículo contra el altar de la parroquia Nuestra Señora de la Merced. Y además causó graves daños en el acceso principal del templo, declarado monumento histórico.
No contento con esto, el hombre intentó incendiar la parroquia, prendiendo fuego a los neumáticos de su vehículo, por lo que debió concurrir Bomberos para controlar la situación.
La persona fue capturada por Carabineros de San Vicente de Tagua Tagua y quedó a disposición de la fiscalía para su control de detención.
En relación a esto, el párroco Osvaldo Rodríguez dijó a radio Bío Bío que “a las 22:15 recibí una llamada de una catequista que me comentó que salía humo de la Parroquia. Al llegar al lugar, al encender las luces había mucho humo y un auto que llegó al altar mayor”.
“Al principio creíamos que era un robo, portonazo, o algún tipo de atentado. Tuvimos mucho temor inicialmente, porque no sabíamos si estaba vivo o fallecida la persona que tenía delirios místicos”, añadió Rodríguez.
“Salía mucho humo del interior del templo. Entonces, al ver que la puerta principal estaba destruida, más la mampara. La comunidad preocupada porque estaba todo destruido”, explicó el párroco de este templo declarado monumento histórico por estar en un sector declarado “Zona Típica”.
“El próximo 14 de septiembre cumpliremos 100 años de la Fundación de la parroquia, pero el templo data de los orígenes del pueblo hace más de 250 años”, recordó Rodríguez.
Con respecto a la persona que provocó los daños, el párroco manifestó que “sólo nos queda rezar por él, no estaba en sus cabales, le pedimos a Dios que le dé lucidez. Los que estábamos ahí, la gran mayoría, a pesar de los daños, nos conmovía, porque claramente no estaba bien”.